Luke Evans, el actor galés que vive entre Madrid y Lisboa: "Amo las almejas, los boquerones en vinagre, las cañas y el tinto de verano"

Para los fans de Disney es Gastón en La bella y la bestia o el cochero de Pinocho. Los seguidores de la saga de Fast and furious lo asocian con el villano Owen Shaw. Y los acérrimos del Señor de los anillos lo conocen como Bardo I, el Arquero. Pero Luke Evans (Gales, 1979) es mucho más que un actor: también es cantante, empresario y escritor.
Desde su Pontypool natal, consiguió llegar a Hollywood. Un sueño para cualquier aspirante a actor, aunque él le quita importancia a la meca del cine: "Para mí es un sitio como cualquier otro, porque se hacen películas por todo el mundo". "Acabo de rodar en Montreal, antes de eso estuve en Australia, y antes en Portland, Oregon. Hollywood no existe en mi mundo. Para mí es un lugar con estrellas en el suelo". Los Ángeles, desde luego, no es su lugar favorito, pero sí está contento "de poder hacer películas" allí.
El británico se encuentra en España por dos motivos: la presentación de su autobiografía (o "memorias", como él prefiere referirse a su libro, El chico de los valles de Gales: mi viaje inesperado); y por su colaboración con la primera edición del festival Ray of light awards (ROLA), una celebración internacional de obras audiovisuales. El festival se celebra en Ibiza del 29 al 31 de mayo y se inspira en la memoria del actor Ray Stevenson (1964-2023) quien escogió la isla como refugio y soñó con crear un evento para celebrar el poder transformador del arte.
"Presento un premio en este festival", informa el actor. "Aunque conozco mucho más a la esposa de Ray. Le ha llevado mucho tiempo y energía sacar adelante el ROLA. Me encanta apoyarlos y ser parte de toda la experiencia". Sobre Ray Stevenson, con quien compartió pantalla en la versión de 2011 de Los tres mosqueteros (el galés interpretaba a Aramis y Stevenson a Porthos) revela: "Éramos muy cercanos. Él es la razón por la que viví en Ibiza".
"Hay pasión en la cultura española y está arraigada en todo, desde la comida hasta la música o la arquitectura"
El actor no es ajeno a nuestro país. De hecho, vivió en el madrileño barrio de Malasaña durante un tiempo. Y como no, se enamoró de nuestra gastronomía: "Como muchas almejas. Y pan, pan, pan y más pan. Me encantan los boquerones en vinagre y tomarme una caña o un tinto de verano con patatas fritas" [todos estos aperitivos los dice en español]. Incluso evoca una anécdota familiar relacionada con nuestras costumbres: "Cuando estoy con José, el padre de Fran [su actual pareja], trae cervezas y nos podemos comer hasta 20 banderillas".
De otro español con el que mantuvo una relación, Jon Kortajarena, ha mencionado que en su momento era "adicto" a él, e incluso comparaba esa relación con el flamenco. "En los lances del amor, a veces no sabes lo que haces. Tienes que avanzar con la relación y esperar que funcione. A veces ocurre, y a veces no", confiesa. También se ríe mientras comenta: "Me encantan los españoles. Y me encanta el drama del flamenco. Hay pasión en la cultura española y está arraigada en todo, desde la comida hasta la música o la arquitectura".
El hecho de que su libro, publicado el año pasado en su idioma natal, haya sido traducido por primera vez a nuestro idioma, para él "tiene todo el sentido", sobre todo, por su "conexión" con nuestro país. "Mi pareja es español, he vivido en Malasaña, he viajado por todo el territorio y es encantador", explica. "Una gran parte del mundo habla español y para mí es algo maravilloso que la primera lengua a la que se traduce mi libro sea este idioma". "Bastante poético, estoy muy feliz por ello", desvela.
Precisamente en nuestro país, en el norte, el actor va a rodar su próxima película a partir de agosto junto a Noomi Rapace, con quien ya compartió pantalla en Desaparecida. En octubre volverá a Reino Unido para grabar un proyecto para televisión que además coproduce. No para, y eso que las oportunidades de trabajo "se reducen cuando vas cumpliendo años". No obstante, Luke Evans considera que los hombres lo tienen "más fácil que las mujeres en la industria" a la hora de cumplir años. Y pone de ejemplo a actrices que a pesar de cumplir años no dejan de trabajar: Nicole Kidman, Reese Witherspoon y "obviamente", Meryl Streep. No se olvida de destacar a Naomi Watts: "Es una exquisitez observarla".
"El teatro no es una broma. Actuar frente al público es diferente cada noche"
Respecto de cumplir años, opina: "¿Por qué renegar de hacerse mayor? Con la edad viene la experiencia". "Puedes volverte más sabio y asentarte en tu personalidad. Yo trabajo porque amo esto, y escojo los proyectos que quiero hacer", asegura. Para él, la década tras cumplir 40 años es "la mejor" que ha vivido "con mucho". "Y si los 50 pueden ser mejor, genial".
Cuantos más años ha cumplido, en más proyectos se ha embarcado. Hasta la fecha, lleva dos álbumes publicados, y también cantó junto a Billy Porter para la banda sonora del largometraje que protagonizaron juntos: Nuestro hijo. Este viernes lanzará su nuevo single que lleva por título Only one of you: "Esta canción trata sobre cómo cada uno de nosotros somos únicos. Deberíamos cantarlo desde las azoteas y celebrar lo especial de cada uno de nosotros".
No contento con actuar y cantar, el año pasado se embarcó en la creación de una firma de moda junto a su pareja, Fran Tomás. "Lanzamos BDXY Studios en febrero de 2024 y en seguida lanzamos la colección de verano". El artista explica que esta marca es sostenible "tanto como se pueda", y por supuesto, "con prendas bonitas".
El actor se confiesa aficionado a la moda: "He estado en Cannes, en alfombras rojas... Conozco este mundillo bastante". Y acude a un hecho de su infancia para ilustrarlo: "Mi madre era costurera. Tenía la máquina de coser sobre la mesa de la cocina y hacía mi ropa". "Entiendo la moda no solo como algo que observar, sino también en cuanto a confección". Además, llevar a cabo esta experiencia junto a su pareja, es algo "emocionante" para el actor. "Hacemos buen equipo, pero sin el drama flamenco", bromea.
Evans no se ha distanciado del teatro en estos años, ámbito en el que comenzó. "Hice una obra en el West End de Londres el año pasado". "Pero es agotador", asevera. "El teatro no es una broma. Actuar frente al público es diferente cada noche. Pero me satisface volver al teatro".
"Por supuesto que necesito terapia. Tengo dos negocios, actúo, canto, escribo... A veces se necesita ayuda para procesar todo, también a nivel emocional"
En ocasiones el estrés provocado por el exceso de trabajo puede llevar a situaciones complicadas. Luke Evans tiene su método para "liberar presión": la ayuda de un profesional: "Por supuesto que necesito terapia. Tengo dos negocios, actúo, canto, escribo... A veces se necesita ayuda para procesar todo, también a nivel emocional". También hay algo fundamental: "Me tomo unas semanas de vez en cuando y aprovecho para ir a andar o pasear a mi perro. Tal y como veo mi salud mental y cómo me siento ahora es algo que nunca había hecho".
Evans cuenta en su libro toda su vida "hasta enero del año pasado", por eso prefiere denominarlo "memorias" en vez de autobiografía. Para él son recuerdos de su "inusual" infancia. Esta época de su vida, precisamente, es el motivo de comenzar a escribir. "Crecí en un entorno muy religioso, entre los testigos de Jehová", rememora. "Sabía que era gay desde muy jovencito y no se lo podía contar a nadie, con lo cual crecer fue muy complicado para mí. Aunque mis padres y yo tengamos una relación muy cercana ahora, no fue nada fácil".
La infancia del actor fue complicada, desde luego. Abandonar los testigos de Jehová era algo que "asustaba" a Evans: "Cuando te crías en un entorno tan cerrado, la religión es lo único que conoces. Pero ahí afuera hay gente por conocer, una vida para ser vivida". "Nunca se puede recuperar el ayer, pero puedes escoger lo que harás mañana", opina.
El galés nunca imaginó todo el éxito que cosecharía porque "ni pensó" en aquel momento lo que iba a hacer con su vida. Por tanto, define su historia como un relato de "esperanza, fe y lucha". "Espero que inspire a la gente que quizá esté pasando por algo parecido. Lo que yo pasé es prueba de que se puede salir de ello y hacer algo extraordinario con tu vida". Y sentencia: "Hay que mantener la esperanza viva".
"No entiendo la obsesión de algunos gobiernos con la comunidad trans"
Con esperanza o sin ella, el artista consiguió triunfar y abrirse paso en un sector en el que ser abiertamente gay no siempre ha sido fácil. Para él "los tiempos están cambiando, por supuesto". Pero advierte: "No podemos relajarnos y pensar que todo está perfecto, porque no lo está". El motivo de ello, según Evans, es que "en las noticias vemos represión, gente que no puede vivir su vida y derechos sustraídos a la comunidad LGTBIQ+, incluso en Occidente". El actor adquiere un tono serio para indicar: "Se están perdiendo igualdades, y hemos luchado mucho para llegar hasta aquí, pero queda un gran camino por seguir a pesar de los derechos que hemos conseguido como seres humanos".
Respecto de las leyes relacionadas con personas transexuales de algunos países, el actor no entiende "la obsesión de algunos gobiernos con la comunidad trans". Evans es consciente de que "solo quieren ser ellos y ellas mismas, y ser felices", y que "solo quieren vivir en igualdad como cualquier persona". "No molestan a nadie, no causan problemas y solo quieren vivir", concluye.
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